29
2016
La sensibilidad dental, ¿qué es?
Cuando un paciente viene a vernos a nuestra consulta es normalmente porque necesita un tratamiento de ortodoncia, pero también tenemos casos de pacientes que sienten dolor en la boca y en los dientes y que no saben cuál es la causa. Por eso acuden a nosotros, para que les ayudemos a aliviarlo.
Uno de los casos más frecuentes es el de la sensibilidad dental, que afecta aproximadamente a 1 de cada 7 personas (suele darse en adultos entre los 18 y los 40 años de edad). Se trata de un dolor intenso y transitorio que si no trata correctamente y a tiempo, puede desencadenar la aparición de enfermedades bucales como caries, gingivitis o periodontitis.
Puedes tener sensibilidad dental si experimentas un dolor breve y agudo cuando tomas alimentos calientes, fríos o cuando hay presión en los dientes (cuando masticas, por ejemplo). Los principales causantes de la sensibilidad dental son las siguientes:
- Bebidas demasiado frías
- Bebidas demasiado calientes
- Fuerza de la masticación (bruxismo)
- Cepillado dental inadecuado
- Alimentos con ácido
- Aire frío
- Algunos tratamiento dentales (ortodoncias y tratamientos periodontales mal realizados, limpiezas dentales no profesioanales…)
La sensibilidad dental se debe fundamentalmente a la retracción de las encías. Esta retracción se produce por muchos motivos, como hemos visto antes, pero en especial por cepillarse los dientes demasiado fuerte, por la edad y la enfermedad periodontal. Esto provoca que los pqueños orificios que hay en la raíz de los dientes (túbulos de dentina) queden expuestos y puedan llegar a abrirse a causa de las bebidas ácidas y de algunos alimentos. Los túbulos abiertos conducen directamente al nervio del diente y eso es lo que causa dolor.
El tratamiento más tradicional para combatir la sensibilidad dental es a través de los dentífricos desensibilizantes. Su forma de actuación es a través de un adormecimiento del nervio, que lo que hace es enmascarar el dolor. Los dentífricos tradicionales pueden tardar entre 4 y 8 semanas en producir un alivio significativo de la sensibilidad.
Aunque lo más recomendable es no esperar a que la sensibilidad dental aparezca, sino adoptar unos hábitos preventivos para evitar que la sensibilidad se desarrolle. Algunos de estos hábitos son:
- Una buena higiene dental
- Un correcto cepillado (buena técnica)
- Utilizar una pasta dentífrica poco abrasiva
- Evitar utilizar palillos de madera
- Tratar el bruxismo (rechinar los dientes) con un tratamiento específico
- Evitar el consumo abusivo de bebidas y alimentos ácidos
Si crees que tienes sensibilidad dental es importante que lo consultes cuanto antes con tu dentista para que te dé un diagnóstico. Sólo un médico puede determinar la verdadera causa de la sensibilidad dental y ofrecerte las soluciones y los productos necesarios para combatirla y acabar con ella.